Los lavaderos de esta gasolinera dan auténtica pena. El lugar está descuidado, sucio y parece que no le hacen mantenimiento desde hace años. Las mangueras apenas tienen presión, los productos de limpieza brillan por su ausencia y el suelo está lleno de charcos, barro y basura. Da la impresión de que a los responsables no les importa en absoluto ofrecer un servicio decente. Es una vergüenza, sobre todo teniendo en cuenta lo que cobran por usarlos. No vuelvo más.
Me atiende la dependienta ala hora de lo del pago muy bien, una buena opraria
La señora trabajadora sudamericana fue mal educada.
Ya no me gusta ir prefiero ir a otra gasolinera. La encargada que lleva bastante allí, cada vez que voy no deja de hacerme preguntas de mi vida privada y ya incomoda bastante. Si trabajo o no y donde trabajo. Que se meta en su vida y deje a los demás que todo es por cotillear.
Son muy exagerados con los precios la botella de agua de marca blanca que vale 22cent la venden a 1,80€ igual que las latas de coca cola…y eso que está en un pueblo que si llega a estar en una ciudad….