P M.
Gracias gracias y gracias María, una experiencia que no nos importaría volver a repetir. Nos gustó muchísimo la historia y María nos va contando durante el recorrido. La instalación antigua de la bodega de como la familia hacia el vino y luego la parte nueva donde la dueña Cristina van produciendo el vino hoy en día actual. Y para terminar por supuesto nos dieron para degustar el vino. GRACIAS MARÍA POR LA EXPERIENCIA.
M V.
Una experiencia bastante cercana, visitar la bodega y parte de la finca, solos y conocer la historia de manera tan cercana no tiene precio. Instalaciones muy bien mantenidas, me ha gustado mucho que cuiden bastante a sus animales 🦚 el vino muy bueno. Merece la pena visitarlo.
D G.
Una visita obligada para los amantes del vino. Te lo explican muy bien y son muy atentos. Los vinos espectaculares.
I A.
En cuanto te recibe María y empieza a explicar de forma clara y amena el viñedo, procesos, a contar anécdotas de la finca ya merece la pena la visita! Ibamos con dos niños de 10 y 12 años y salieron encantados, disfrutando solo de escucharla. Y la cata de los dos vinos, buenísimos ambos, acompañados de queso canario y mojo estuvo genial!!
D M.
Preciosa visita que hemos realizado un grupo de amigos a esta bodega. Visita muy cercana, familiar, clara y entretenida. Se nota el amor que transmiten los dueños de la finca y las ganas por mantener una tradición forjada durante muchos años por sus antepasados. La visita finaliza con una cata de varios vinos y productos locales.