Es una gran profesional y una buenísima persona, se preocupa de sus pacientes y con esa dulzura,que le caracteriza, hace que los niños no les tenga miedo a ir al dentista,
Recuerdo a Teresa con mucho cariño. Estuve de pequeña en sus manos cuando tenía un miedo terrible a los dentistas. Ella como por arte de magia, consiguió que todos esos miedos desapareciesen y pudiese dejarme los dientes de maravilla. Gracias Teresa por tu trabajo y por la paciencia que tuviste conmigo.
Teresa es un amor y no se como lo hace pero, tranquiliza a los pequeños hablandoles y consigue que estos colaboren. 100% recomendable!
Es genial!