Espectacular a todos los niveles, profesional, atento, amable, preocupado al segundo por tu bienestar y muy profesional sabiendo aconsejar y con una muy buena mano. El nivel de trato es como estar en una peluquería de famosos y entras contento y sales mejor que ir a Lurdes. Recomiendo encarecidamente el ritual, es una maravilla, sales relajado, satisfecho y más guapo que un San Luis de Palo. Si pudiera le daría 8 estrellas sin dudarlo y el corte, afeitado, lavado y el ritual que hace tendría que ser obligado por prescripción médica en la Seguridad Social, toda una experiencia que voy a repetir cada mes sin falta.... porque yo lo valgo.
Después de haber buscado barbería en Valencia durante unos meses si con Mostatxo. ¡Y vaya acierto! Sin duda alguna una de la mejores barberías a las que he ido (a general). Ambiente relajado y barbero profesional, eficiente y siempre amable. ¡Sin duda alguna un sitio excelente y muy recomendable!
Si buscas un lugar con buen rollo y un trato cercano, estás en el sitio perfecto. Es una peluquería de barrio donde Javi siempre te atiende con una sonrisa y hace que te sientas como en casa. El ambiente es relajado y amigable, y siempre sales con un corte perfecto. Ideal para quienes buscan calidad y buen trato en un sitio de confianza. ¡100% recomendable!
Me encantó el tratamiento en la barba que me hice el sábado pasado!! La profesionalidad de Javi y su trato tan cercano y tan personal hacen de la visita a su barbería un momento único de dedicación a uno mismo... se nos olvida que también debemos mimarnos y dedicarnos tiempo para reponer energías, y sus tratamientos nos cargan las pilas! Si buscas un profesional, sin duda estás buscando a Javi! Gracias por estar ahí!
Encontré Mostatxo a raíz de la pandemia, siguiendo la recomendación de un amigo a quien había sorprendido la pulcritud, higiene y cuidado al detalle del lugar. No he dejado de acudir, descubriendo que esa atención al detalle se extiende a todos los aspectos: desde el educado y respetuoso trato personal, hasta la decoración del local, pasando por el rigor con la gestión de citas y horarios, hasta la elección de la música ambiental; y por supuesto, el exquisito mimo que se aplica a la realización del corte de pelo. Multitud de herramientas, usando cada una para detalles ínfimos si es necesario, hasta conseguir el efecto final perfecto; buen consejo sobre productos y su aplicación; en fin, lo que se dice un trabajo bien hecho. Disponer de una hora entera para cada cliente es algo rara vez encontrado en peluquerías o barberías, y es algo que permite este ritmo pausado pero muy eficiente para conseguir un resultado fabuloso en un ambiente tranquilo. Javier es un profesional como la copa de un pino, ese tipo de personas que dedican su vida a realizar su trabajo de la mejor manera posible, siempre intentando mejorar. Ojalá más gente se tomase tan en serio su trabajo y mostrasen tal devoción por hacer que los clientes estén a gusto.