E J.
He ido 2 veces y las dos decepcionado. Estuve en 1ª consulta de alergología con cita previa y tardó en atenderme más de una hora. La segunda vez que he ido (hoy) llegué con antelación suficiente pero en recepción había cola. El chico que daba número no daba abasto, fui atendido en recepción media hora después de llegar y luego he estado esperando más de una hora en la puerta de la consulta, solo ha llamado a una persona en ese tiempo y me he tenido que ir sin ser atendido. Para ser un centro médico privado deja muchísimo que desear, las instalaciones serán muy modernas pero no hay una buena atención, juegan con el tiempo y la paciencia de la gente. Lo más gracioso es que en el recordatorio que envían por SMS siempre pone: “el tiempo de su médico es importante”. ¿Y el de los pacientes no? Por supuesto, no voy a volver y no lo recomiendo para nada.
L G.
Doy gracias a las personas, trabajadoras de Viamed San Fernando, que han asistido esta mañana a mi madre por una caída en la vía pública muy cerca de vuestro centro. Tanto a la persona que la atendió en primera instancia y la acompañó a la clínica para darle atención de urgencia mientras no venía taxi para llevarla a Urgencias del SAS, así como el resto del equipo que la habéis curado, asistido y calmado. No somos clientes de Viamed pero os estamos enormemente agradecidas. Grandes profesionales y grandes personas. También gracias a las personas viandantes que la han atendido.
S
Desde que voy a viamed, me parece increible todo. La mejor atencion, medicos e instalaciones que puedes pedir no podria estar mas contento.
F M.
Es la primera vez que asisto a esta clinica por ser de fuera pero trabajar en la ciudad.. Muy buena atencion por parte de los tecnicos y medicos en Viamed de San Fernando y unas instalaciones modernas y muy limpias. Todo un ejemplo positivo para otras clinicas.
M M.
Fatal el trato Te toman el pelo. Llamas para pedir cita. Te toman los datos y te dicen que te llaman. Esperas. No llamas. Vas a la clínica,y te dicen que no es cosa suya. Tomadura de pelo. Una clínica a la que no volver. Malos profesionales